¡SORPRENDENTE!

OCTAVIO VÉLEZ ASCENCIO

A pesar de las versiones de una eventual intervención de las fuerzas de seguridad y de agresiones de porros y pistoleros priístas, decenas de miles de oaxaqueños, hombres y mujeres, volvieron a salir ayer a las calles para demandar la salida del gobernador Ulises Ruiz Ortiz y el retiro de la Policía Federal Preventiva (PFP).

Fue tan grande la Sexta Megamarcha Magisterial y Popular que cuando la vanguardia pasaba frente a una embotelladora ubicada en la Avenida Oaxaca, en inmediaciones de la agencia municipal Santa Rosa, la retaguardia apenas estaba partiendo del crucero de Viguera, sobre la Carretera Internacional "Cristóbal Colón".

Niños, jóvenes y ancianos, caminaron alrededor de 12 kilómetros hasta llegar al atrio del templo de Santo Domingo de Guzmán, donde está ahora situado el plantón de la Asamblea Popular de los Pueblos de Oaxaca (APPO), mientras los agentes de la PFP se atrincheraron en la Plaza de la Constitución. Incluso, en las esquinas de las bocacalles colocaron alambre de púas y cerraron completamente el tránsito de personas.