EN OAXACA APARECIÓ EL LOBO

ÍNDICE POLÍTICO
FRANCISCO RODRÍGUEZ

"Una vez mas el instinto criminal de Ulises Ruiz Ortiz y su mafia gobernante han enlutado los hogares del pueblo de Oaxaca, han utilizado a sus mercenarios, paramilitares y cuerpos policíacos con el fin de amedrentar a un pueblo que ha decidido liberarse de la opresión y los abusos permanentes de este gobierno estatal… El tirano y sus colaboradores se sienten impunes por sus actos criminales, porque así se lo han garantizado el gobierno federal y los que detentan el poder económico en nuestro estado; las responsabilidades por sus actos las tendrán que afrontar ante el pueblo, independientemente que cuenten con el apoyo de quienes los protegen."

COMITÉ ESTATAL DEL PARTIDO DEMOCRÁTICO POPULAR REVOLUCIONARIO.
COMANDANCIA MILITAR DE ZONA DEL EJÉRCITO POPULAR REVOLUCIONARIO.

Oaxaca de Juárez, a 22 de agosto de 2006
COMO EN LA fábula, a Ulises Ruiz se le apareció el lobo. Presentada la guerrilla que actúa en Oaxaca como "un actor de incidencia delincuencial y no en el contexto de las causas sociales en las cuales emerge y dieron origen", hace tres días el PDPR-EPR lanzó un nuevo comunicado que para usted y para mi analiza el investigador Jorge Lofredo, quien agrega que el uso político del término guerrilla "se presenta con connotaciones negativas y no se le reconoce, de ninguna manera, como un actor político-social", lo que ha incrementado la polarización social en el estado sureño.

"Y la urgencia de la hora es encontrar un salida al conflicto. Pero en tanto que ese canal no existe, el tiempo transcurrirá como un elemento que cada vez más desfavorable para ambas partes: las salidas se agotan, los actores e instituciones políticas continúan deslegitimándose ante los ojos de la inconformidad, y la ingobernabilidad puede derivarse a situaciones de mayor violencia.

"La lógica del último comunicado del PDPR-EPR, al cual puede sumársele los otros escritos recientes de las demás organizaciones armadas, descubren que sus dinámicas coyunturales distan de ser militares sino que éstas son fundamentalmente políticas: el objetivo a corto plazo es la renuncia del gobernador; en cambio a largo plazo, es la revolución. Hoy, la guerrilla está expectante a la primera opción, a la que considera viable, posible y próxima."
Lofredo también apunta que "en tiempos de crisis políticas y sociales de magnitud la represión no es solución, sino la recrudece: en todo este tiempo y a pesar de los muertos no ha mermado la intensidad del reclamo.

"Oaxaca sabe y conoce de presencia guerrillera -y mucho antes de 1996, cuando el PDPR-EPR atacó en Huatulco y Tlaxiaco, aunque no es el caso. La organización no ha hecho presencia pues se volvería el chivo expiatorio ante una espiral represiva.
"A ello agréguese que no se han constatado denuncias de ninguna especie que confirmen la acción militar de algún grupo insurgente. En el escrito mencionado claramente puede verificarse que el grupo habla en primera persona, sin embargo no lo hace como organización sino que su reivindicación apunta, prioritariamente, a la participación popular donde el eje del documento no son las acciones guerrilleras, que en las circunstancias que vive Oaxaca serían viables, sino el accionar del pueblo.

"Los acontecimientos de Oaxaca han superado a cualquier estructura política, social o militar. La dinámica del conflicto y la conformación del movimiento rebasó cualquier otra acción…"
A Ruiz se le apareció el lobo.